Aun cuando los expertos financieros han atribuido a la reforma financiera y fiscal que el peso no se encuentre en peores circunstancias, la realidad que azota al país es otra.
La caída abrupta del valor del peso es la muestra inequívoca de que por diversos factores, aun cuando se quiera expresar que es por la oferta y la demanda, México y su economía sufren una crisis.
La Comisión de Cambios, integrada por la Secretaría de Hacienda y el Banco de México, decidió enfrentar la volatilidad en el mercado cambiario y anunció la reactivación de un mecanismo de subastas diarias de 200 millones de dólares cuando el peso se deprecie al menos 1.5 por ciento respecto a la sesión anterior.
Este mecanismo de estabilización cambiaria, que en el pasado ha dado buenos resultados, comienza a operar desde hoy durante un tiempo indeterminado.
El objetivo de este instrumento es “proveer de liquidez al mercado cambiario en caso de que ello llegare a ser necesario”.
La medida fue tomada por la Comisión de Cambios ante la “reciente volatilidad” en los mercados financieros que ha provocado que la cotización del peso frente al dólar se colocara el viernes pasado en su peor nivel en cinco años, al cerrar en 14.38 pesos por cada billete verde. En operaciones de menudeo de ventanilla, el dólar se llegó a vender en alrededor de 14.80 pesos.
La moneda mexicana sufrió su peor caída porcentual en todo 2014 y alcanzó niveles similares a los de 2009, en plena crisis financiera mundial.
El dólar Fix, en tanto, concluyó en 14.40 pesos, acumulando una diferencia de 10 centavos respecto al cierre anterior.
Como anotó el Banxico, ésta no es la primera ocasión en que se aplica el mecanismo de subastas de dólares. La última comenzó a operar el 29 de noviembre de 2011.
Entonces la Comisión de Cambios anunció la subasta a la venta de 400 millones de dólares diarios a un tipo de cambio mínimo de 2 por ciento superior al correspondiente al día hábil inmediato anterior.
Por aquellos días, la cotización del dólar llegó a 14.30 pesos, un nivel similar al de finales de la semana pasada.
La volatilidad que se contempla atacar con la subasta de dólares ya se veía venir desde principios de año. Los miembros de la Junta de Gobierno del Banxico afirmaron en febrero que no se podía descartar “una salida de capitales que afecte las fuentes de recursos disponibles para la economía del país”.
Hoy vivimos tiempos de una real crisis económica. Una devaluación disfrazada.
Tiempo al tiempo.

*Premio Nacional de Periodismo