“Constancia: no del que comienza sino del que persevera.”
Leonardo Da Vinci

El gobernador Javier Duarte confirma una vez más que lo suyo a parte de gobernar es la estrategia, el análisis, la jugada planeada, en balde se dice en los corrillos políticos, que cuando parece estar en el peor escenario, siempre cae parado, y esto se lo comentamos, porque este miércoles 24 de junio pasará a la historia por haber sido el día en que perfiló toda la estrategia para el futuro cercano y lejano.
Pero vayamos por partes, este miércoles el Congreso del Estado, aprobó su iniciativa para que se logrará la ampliación del periodo concesionario para la operación del túnel sumergido de Coatzacoalcos, por consiguiente cuenta ya con el elemento normativo de su lado para concluir una obra que se habría erigido en el monumento a la ignominia de tres administraciones.
De igual modo, el mismo Congreso ha turnado a las comisiones permanentes unidas de Organización Política y Procesos Electorales y de Justicia y Puntos Constitucionales, para su estudio y análisis la iniciativa que deja claro que tendremos en Veracruz una gubernatura de dos años, con ello, el proyecto para que un Yunes gobierne será una realidad, y con ello se construye el escenario perfecto para la continuidad del Fidel-Duartismo.
Y es que se asegura que el acuerdo con quien sería el candidato a la gubernatura con el respaldo del gobierno estatal lo obligaría a entregarle la estafeta a un futuro candidato formado y proyectado por el grupo en el gobierno.
Quién sería ese futuro gobernador… previsible que sea el diputado federal electo por el Distrito de Acayucan, Erick Lagos Hernández.
Vea porque le decimos esto.
Los recientes cambios dentro de la administración estatal, no fortalecen como muchos pensarían al actual secretario de Gobierno, Gerardo Buganza, pues la salida de Marlon Ramírez Marín no responde a la impronta vertida por los medios de comunicación que obedecería a traiciones al interior de su partido, nada más contrario a ello.
Ramírez Marín se formó desde adolescente en las filas del Revolucionario Institucional, cuenta con toda una carrera política dentro de su partido, desde líder juvenil, secretario general y presidente del Comité Directivo Municipal en Veracruz, por ello, suena absurdo y hasta ilógico que alguien que toda su vida dentro del PRI pretenda meterle el pie a quien le debe todo.
Por el contrario, su salida obedecería a un acuerdo político entre Jorge Carvallo Delfín y el propio Erick Lagos Hernández con la venía del propio Duarte de Ochoa.
La llegada de Genaro Mejía de la Merced a la subsecretaría de Gobierno lo confirma, perteneciente al grupo político de Lagos Hernández apuntala lo que se está cocinando, y que será como mantener el control para el proceso sucesorio y por supuesto dentro de la próxima administración gubernamental, que será tan efímera que se necesitará construir la siguiente sucesión.
Se sabe de fuentes confiables que las sorpresas se darán pronto, lo cierto es que se avecinan los cambios en el PRI, tras el proceso electoral del 7 de junio, por lo que no será de extrañarnos que arribe a la dirigencia el hoy ex subsecretario de Gobierno, Ramírez Marín para entonces operar la campaña, reafirmando que el proyecto es Erick Lagos.

Al tiempo.

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