Es tan parejo como un México vs Alemania en Berlín

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Para la reflexión el tema del duelo jurídico que mantendrán, por un lado los abogados defensores de Javier Duarte y por el otro, la PGR, que al menos en el papel, representa los intereses ciudadanos a través del Poder Ejecutivo.

En lo que corresponde al ex gobernador de Veracruz, su defensa legal será asumida por el despacho Del Toro Carazo Abogados, misma firma que se encarga de intentar salvaguardar los intereses de la maestra Elba Esther Gordillo, frente a las acusaciones del Estado Mexicano. Hasta ahora van por buen camino para la causa de la ex lideresa.

Todos coinciden en una cosa: Del Toro Carazo Abogados es un bufete de lo mejor entre los mejores, como podemos darnos cuenta, sus clientes son miembros de las elites del poder caídos en desgracia. Duarte está en manos de expertos en todo tipo de leyes y artimañas.

Por el lado contrario, tenemos a la PGR y la Fiscalía de Veracruz, que la verdad sea dicha, no generan gran confianza en materia de eficacia, ejemplos para decirlo sobran.

Tanto el procurador como el fiscal, fueron propuestos por sus jefes (aunque presuman autonomía formal), porque estos consideran que son leales a la causa de sus proyectos políticos, o sea, el primer mérito para llegar al cargo es la lealtad, no la capacidad.

Así las cosas, no se requiere ser adivino para suponer que Javier Duarte llega ante los jueces con un equipo de abogados ‘perrones’, del otro lado…la historia de siempre.


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