Cuando todo mundo da por hecho que el tamal de la de dos y la que sigue de seis, serían para Héctor y Pepe, la esfinge advierte que Veracruz no es de apellido Yunes.

Ello en buen romance se traduce que no hay acuerdo entre Javier Duarte y los Yunes priistas; que no está previsto encuentro alguno, que no hay preacuerdo y la bola sigue suelta.

Todo ello de cara al azoro de la sociedad civil que observa como el PRI se fagocita.

Este domingo tocaría al maestro Juan Nicolás Callejas entregar el mensaje a los de nuevo crecidos José Francisco Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa.

Y es que de cara al proceso electoral de 2016 para renovar la gubernatura de Veracruz, que será de dos años, el diputado Callejas, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, dijo que el candidato a gobernador no debe ser necesariamente de apellido Yunes.

“El estado no es de apellido Yunes es de miles de apellidos que se dedican a la acción política y el deseo de servir al estado así que tal parece que estamos encerrando la elección en Yunes, no, pueden ser los Pérez, los Fernández, los que quieran, los Ríos, creo que no, cometeríamos un error si pensamos que la candidatura es de un apellido, es para todos los que deseen participar”.

De inmediato los Pérez, los Fernández y los Ríos revivieron: Erick, Montano, Mota y Silva ¡siguen vivitos y coleando!

Juan Nicolás no es más que portavoz del primer priista que se revuelve, piensa y repiensa en su más firme intención de atajar a todo el grupo Yunes que este fin de semana toma vuelo al ratificar el senador y aspirante a la gubernatura Héctor Yunes Landa que él y Pepe van con todo por la de dos y la de seis, ya que su proyecto es de ocho años.

Héctor insiste en que Veracruz ya no puede ser botín de un grupo en tanto que Pepe da cuenta que se tiene que “construir un proyecto alternativo de estado”.

“Hay una total y completa coincidencia con Héctor en la necesidad de empezar a construir un proyecto alternativo de estado. Un proyecto que le dé a Veracruz un rumbo diferente en materia económico-financiera, en materia social y en materia política y evidentemente será con la participación de muchas voces, de distintos sectores, de distintas regiones del estado”, expuso.

“La gubernatura de dos años, y la de 2018 vamos a caminarla Héctor y yo, con quien hay una total y completa coincidencia”.

Veracruz está pues en el umbral de la ruptura total.

Tiempo al tiempo.


*Premio Nacional de Periodismo