Adán Cabral Sanguino

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Tradicionalmente, en México, el primer viernes de marzo está cargado de misticismo, ya que, en esta fecha, se celebra la fiesta de las plantas, en donde la naturaleza sana, nutre, purifica, y trasmuta en algo positivo. Por ende, en las diferentes regiones culturales del país, se practican rituales para impregnar a sus practicantes de energía positiva y alejar las malas vibras, toda vez que las limpias son una tradición de índole prehispánica. Aunque también es una fecha emblemática para la práctica de brujería, como en Catemaco.

De hecho, hay quienes comprenden la magia como la creencia en que a través de ritos esotéricos, hechizos y saberes arcanos, pueden manipularse fuerzas sobrenaturales, para afectar la realidad a voluntad. De ahí que sea común la confusión entre brujos, chamanes, hechiceros y curanderos, que no son lo mismo, ya que la brujería está asociada con la magia negra; los curanderos son los que trabajan con la herbolaria y sus propiedades curativas; mientras que los chamanes trabajan, primordialmente, con la práctica espiritual denominada magia blanca.

Así, en la entidad veracruzana, por ejemplo, somos testigos de los Xochitlallis (Cantos a la Tierra) que se efectúan en la zona de las Altas Montañas; hechizos, ceremoniales y limpias en Xico, Misantla, Teocelo, Xalapa y otros municipios del territorio jarocho.

Este año no será la excepción. E incluso habrá otro acto mágico: el inicio de las campañas electorales, en las que Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán cambiarán de gobernador y congresos locales, en tanto, la Ciudad de México elegirá jefe de Gobierno y sus respectivas Alcaldías. En el ámbito federal, estarán en juego diputaciones y senadurías, en las cuales, los partidos contrarios a Morena y sus aliados, buscarán un escaño para conseguir fueros y posiciones de negociación política.

De acuerdo con El Economista, a una semana de que inicien las campañas de manera formal, Claudia Sheinbaum, candidata de la coalición de Morena, PT y PVEM a la Presidencia de la República, se mantuvo en el primer lugar de las preferencias electorales con 51.6%; le siguió Xóchitl Gálvez, de la coalición del PAN, PRI y PRD, con 27.8%, y en tercer sitio se ubicó, con 5.1%, el abanderado de MC, Jorge Álvarez Máynez. Así que sólo un acto de magia podría revertir significativamente estas tendencias. Por eso, los inicios de campaña de los mencionados candidatos serán, respectivamente, el icónico Zócalo de la Ciudad de México, a las 4 p.m. (número que representa la estabilidad, la organización y el trabajo duro); Fresnillo, Zacatecas, municipio con la mayor percepción de inseguridad, a la medianoche (hora en que inician los ritos de purificación); y Sonora (tierra natal de Luis Donaldo Colosio), territorios todos con cierta comodidad para que los aspirantes muestren, entre símbolos, su músculo político ante sus seguidores.

Esperemos que la referida contienda se desarrolle en un clima de paz, a fin de que tengamos un proceso civilizado, y que el debate de propuestas predomine sobre las descalificaciones y la polarización que en nada ayudan a la armonía social. Al tiempo.

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