ES CLARO que no hay soluciones mágicas para el problema financiero del Estado, de tal manera, que recurrir a estrategias económicas a largo plazo, es lo mismo, pues lo importante del caso sería que el gobierno del estado, no se siguiera endeudando, porque si en este momento se piensa que la deuda contraída, ya es impagable, pues entonces, imagínese lector, lo que pasará si se siguen consiguiendo recursos que agranden el monto a pagar y aunque éste sea a cincuenta o treinta años, es deuda y es dinero que se convierte en compromiso y se tiene que pagar.

En cada sexenio, los veracruzanos, se comprometen, a través de las diversas administraciones a pagar la cantidad que le corresponda, pues los gobiernos, son encabezados por personas físicas que un día están y en resto de su ni se les ve para cobrarles o para hacerlos responsables de todos los préstamos que piden para quedar bien, sin que vuelvan a ser llamados a cumplir con los compromisos contraídos.

La famosa reestructuración financiera que se pretende llevar a cabo, no es más que un endeudamiento más, aunque, como ya se señaló, sea a cincuenta años a pagar como lo establece la iniciativa o sea a treinta años como los diputados, quieren que sea, en todo caso será lo mismo, y en pocos meses, los actores políticos de ahora, posiblemente ya no se encontraran en el ejercicio del poder y por lo tanto, se convertirán en personajes inalcanzables para hacerlos responsables de los famosos endeudamientos, aparte, eso sí, de que para cuando se tenga que cumplir exactamente con este compromiso, ya ni siquiera existan, pero la deuda sí, porque es un compromiso oficial, diríase institucional, por lo que ningún gobierno del futuro podrá decir, esta deuda no es mía y por lo tanto, no la pago, sino que también hará lo mismo al no tener recursos económicos frescos para cumplir con sus proyectos, optará por endeudar más al estado.

Este ha sido el camino que se ha venido siguiendo desde hace tiempo, por lo que la deuda ha crecido considerablemente y ahora se ha llegado al momento en que al no haber recursos para trabajar, se tienen que sacar de algún lado, sin importar la fórmula, pues en todo caso, no hay, como ya se dijo, una estrategia especial que haga aparecer dinero, sin que se tenga que comprometer el futuro de la entidad y consecuentemente, de todos los veracruzanos.

No se necesita pues, estar plenamente empapado en cuestiones de economía, sino en la realidad que se ha venido viendo de hace tiempo.

Lo mejor, en todo caso, sería abrir las puertas del estado, para que las inversiones llegaran y se pudieran obtener recursos, dando oportunidad, además, de crear empleos que en todo caso, es lo que se requiere en estos momentos de gran incertidumbre económica, la cual, no es privativa del estado, sino de todo el país, donde ya se tienen enormes problemas para satisfacer las necesidades de gran número de mexicanos, que no tienen un empleo para seguir subsistiendo.

Así es que, cincuenta, cuarenta o treinta años de plazo para pagar la deuda, como parte de la reestructuración, sería, sin duda alguna, el cuento de siempre, dejando al final de cuentas, un estado, financieramente inviable.

Lo primero, que en todo caso, se tiene que hacer, es evitar, por todos los medios, las fugas de dinero, como ocurrió con el gobierno anterior y procurar que la impunidad no siga siendo el principal obstáculo para hacer que vuelvan a las arcas estatales, los recursos que fueron saqueados impunemente, porque ahí esta una buena mina de recursos económicos que pudieran salvar, en estos momentos, los grandes compromisos que tiene la actual administración estatal.

No suena bien, entonces, que se quiera seguir endeudando al estado, con un proceso ampliamente conocido de la reestructuración, que no es otra cosa que ampliar el plazo de pago de una cantidad que se debe y que se tiene que pagar, aunque claro, con la reestructuración, se obtendrían recursos otra vez, pero éstos se sumarían a la gran cantidad que ya Veracruz, tiene como deuda principal a sus principales acreedores.

Aquí, al parecer, no han fondo perdido, por lo que con tasas de interés más bajas que se llegaran a conseguir, lo importante sería el capital, que multiplica con más créditos.

El panorama económico es difícil, sí, pero se puede manejar adecuadamente, más si en estos momentos, son expertos financieros los que tienen en sus manos, el futuro económico de la entidad.

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COMO SIEMPRE, será en último momento, cuando el Partido Revolucionario Institucional, decida quién será el candidato a las alcaldías de los principales municipios de la entidad.

Se ha estado retrasando este proceso interno, con alguna estrategia política, pero hay quienes piensan que todo se debe a que no hay los suficientes precandidatos para poder escoger al que garantice mejor el éxito electoral.

En la elección municipal, se cree, que el PRI se está jugando casi sus últimas cartas para seguir permaneciendo en panorama político de la entidad, pues si llega a perder más de los municipios, que se tienen programados para ganar, entonces, se habrá de estar en condiciones riesgosas de no estar en condiciones políticas para enfrentar el proceso político donde estarán en juego la gubernatura del Estado, como la propia presidencia de la república, tomando en cuenta que para el país, se sigue creyendo que Veracruz, es la joya de la corona, hablando electoralmente, pues ya se colocaron otros estados, en este mismo ejercicio político, como el propio Estado de México, donde también las cosas no pintan muy bien para el tricolor.

Los esfuerzos de la actual dirigencia estatal, se perderán si las cosas no salen como se tiene planeado.

Hay problemas en Xalapa, en Veracruz, en Córdoba, en Orizaba y en Poza Rica, por lo menos, para poder garantizar un triunfo electoral.

La actual situación política del PRI, tiene espantados a los priistas, pues ni siquiera los buenos operadores políticos, han salido a ponerse en contacto con la nueva dirigencia, ni tampoco se han puesto a las órdenes de su partido, como solía ser antes. Como se ve que la falta de recursos, les afectan considerablemente.

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AUNQUE SE DIGA lo contrario, se le sigue debiendo a los municipios veracruzanos, fuertes cantidades de recursos económicos, por lo que los alcaldes, siguen en pie de lucha para rescatar lo que tienen en la Secretaría de Finanzas y Planeación.

No es mera casualidad, que el mismo presidente de la Federación Nacional de Municipios de México, Américo Zúñiga Martínez, haya enderezado su discurso reciente en el sentido de que es necesario el fortalecimiento municipal, y desde luego, que no se refería, solamente, a la parte legislativa, sino más bien, a la entrega oportuna de los recursos que la propia federación les ha enviado.

Entonces, doña Clementina Guerrero, tuvo y tiene, desde luego, la palabra para responder directamente a los alcaldes veracruzanos, que pasó y que pasará con los recursos municipales, porque de alguna manera, se tienen que hacer llegar a su destino, que son precisamente las arcas municipales, sea como sea, el camino que tales recursos han tenido al pasar por la Secretaría de Finanzas, pues como ya se dijo, con compromisos institucionales y se tienen que pagar.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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