“Quien no ha afrontado la adversidad, no conoce su propia fuerza” (Benjamin Jonson)

Todo guardado. Todo ocultado. Todo reservado. Todo secreto. Así se nos dice que debe ser gran parte de la información del gobierno en México.
Lo que nadie puede negar es que el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, está cumpliendo la promesa que hizo a un grupo de industriales: "reducir a su mínima expresión" delitos como homicidios, extorsión, secuestros y robos.
El funcionario informó que en Veracruz, La Laguna, Nuevo León, Chihuahua y Michoacán se ha logrado "disminuir a su mínima expresión" la violencia. Hagan memoria, hagan memoria, sugirió Osorio Chong. "Apenas hace dos años en algunos estados como Veracruz había enfrentamientos y cobraban víctimas civiles. Hoy esa violencia se ha reducido, atendemos y avanzamos. La instrucción del presidente es devolver la tranquilidad al país".
El estado de Veracruz es uno de los pocos que ha conseguido reducir los índices delincuenciales en su territorio.
Destacó que gracias a la coordinación de los gobernadores con las autoridades federales, muchos estados disminuyeron los registros de diferentes delitos. El más claro ejemplo de que se puede avanzar en ese sentido es Veracruz, y es que en Veracruz, la recuperación de espacios públicos se ha convertido en eje fundamental de la política de seguridad que impulsa el gobernador Javier Duarte de Ochoa.
A través de los operativos Blindaje que se aplican en el norte, centro y sur del estado, se trabaja de la mano con la sociedad para lograr que los parques, jardines y espacios de esa naturaleza vuelvan a manos de los jóvenes.
Los buenos resultados, según Miguel Ángel Osorio, están ahí, son los que dio el INEGI el pasado 23 de julio sobre el número de homicidios registrados en 2013.
Hoy, gracias a la información que el INEGI dio a conocer, podemos tener una respuesta.
¿Por qué entonces más del 70 por ciento de la población mayor de 18 años tiene la percepción de la inseguridad en su entidad federativa? Le preguntaron al secretario de Gobernación, quien respondió: “Bueno, la percepción es de lo más complejo en disminuir, pero creemos que con las acciones que se están implementando, con la disminución de los homicidios que reporta el INEGI, poco a poco vamos a derrotar esa percepción”. ¿Y las cifras del secuestro, extorsión, robo a casas habitación, a transeúntes, a vehículos, cuándo se van a reducir? “Bueno, no se puede hacer todo al mismo tiempo. Hay que tener paciencia, mucha paciencia, porque el combate a la delincuencia organizada y desorganizada en todo el país llevará muchos años”.
No faltan los escépticos que a pesar de las cifras del INEGI sobre la baja de homicidios, cuestionan los resultados.
En Veracruz, gracias a la estrategia Policía Municipal Acreditable, implementada por la Secretaría de Seguridad Pública, se ha construido como referencia y ejemplo nacional en materia de seguridad ciudadana mediante la acreditación, certificación y adiestramiento de las corporaciones locales que se han integrado a este programa.
Garantizar la paz social y el estado de derecho, son los principales objetivos de este esquema.
Hasta la fecha 118 municipios forman parte de la estrategia Policía Municipal Acreditable y se cuenta con 906 elementos egresados y acreditados gracias al trabajo coordinado entre los tres órdenes de gobierno, Veracruz está venciendo en la lucha contra la delincuencia al aprehender, abatir o desmantelar células de grupos criminales que pretendían asentar sus reales en territorio estatal, aseguraba el gobernador Javier Duarte de Ochoa.
Precisó que trabajando de manera conjunta se impulsa la participación ciudadana para alcanzar un mayor desarrollo y una mejor integración social.
Más allá de los recursos que se invierten en estas actividades, "que son muchos y son de los tres órdenes de gobierno, como lo instruyó el presidente Enrique Peña Nieto, es necesario que los alcaldes sean más creativos".
Y cambiando de tema, también en esta misma columna le he comentado que si el gobierno de México no piensa en serio e invierte en serio en la capacitación de los maestros del país, la reforma educativa se traducirá en poco más que una colección de cambios legales y buenas intenciones.
Capacitar a los docentes es fundamental, pues sin maestros capacitados la reforma simplemente no tendrá pies.
La investigación más robusta a nivel internacional indica con claridad que, dentro de la escuela, el factor que más influye en la calidad de los aprendizajes de los alumnos es la calidad de sus maestros.
Hasta el momento y más allá de las nuevas disposiciones legales al respecto, no queda claro cuál es el plan concreto de las autoridades educativas en torno a este tema.
Por ejemplo, no sabemos todavía cuántos recursos se invertirán en ello, cuáles objetivos habrán de priorizarse ni cuáles serán los formatos específicos a través de los que habrá de impartirse la capacitación.
Como en tantas otras áreas, México parece ser el país de la "cursitis" y la "talleritis" al vapor y a la carrera.
Para cualquier problema, nuestra solución favorita es impartir un curso más sin pensar mucho en cómo ni para qué en específico.
El muy pobre nivel de aprendizaje efectivo de los alumnos mexicanos indica que hacer más de lo mismo no va a resolver el problema.
Lo que requerimos es un enfoque distinto.
Formas de capacitación que le den a los docentes las herramientas prácticas para motivar a sus alumnos y para lograr que hagan suyos saberes y prácticas que amplíen sus horizontes y sus posibilidades.
Menos planteamientos abstractos y muchas más técnicas específicas y ejecutables en el salón de clases día con día.
Más guías aterrizadas para equiparlos mejor para ejercer con éxito su práctica docente cotidiana.