Más de 15 mil personas se reunieron ayer en la ciudad de Montreal para conmemorar a las víctimas del ataque racista y terrorista ocurrido en Quebec.
Bajo el hastag #SalamQC, los participantes y miembros de la comunidad denunciaron las políticas racistas no solamente del gobierno canadiense sino del nuevo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Por eso varias acciones fueron realizadas, como la toma de la embajada de Estados Unidos a partir del mediodía.
El ataque contra una mezquita en la ciudad de Quebec dejó seis muertos y varias personas heridas, informaron medios locales de prensa.
Los fallecidos tenían entre 35 y 70 años de edad, confirmó el vocero de la policía local.
Un joven quebequense arrestado poco después del tiroteo fue acusado este lunes formalmente por el ataque terrorista, del que se considera el único autor.
Alexandre Bissonnette, de 27 años, tendrá que responder ante la justicia por seis cargos de asesinato premeditado y cinco más de intento de asesinato que se le impusieron en su primera comparecencia ante un juez.
Esto es una barbarie, expresó el presidente de la mezquita, Mohamed Yangui.
El Centro Cultural Islámico de Quebec, conocido como una gran mezquita, fue blanco de un ataque de odio, aunque mucho menos grave, en junio pasado, cuando una cabeza de cerdo fue colocada delante de una de sus puertas durante el Ramadán.