¿QUIÉN CAZARÁ A DUARTE?, GOBIERNO FEDERAL O MAYULI. Ente las primeras actividades que tuvo Miguel Ángel Yunes fue el anuncio de que se había “recuperado” el rancho El Faunito, para el cual se utilizaron 200 millones de pesos y en el que hay pinturas de gran valor.
Ubicado en Fortín de las Flores, mencionado como uno de los sitios en los que se vio por última vez a Javier Duarte, la cual fue “donada” por uno de los prestanombres del hoy prófugo, aparentemente José Juan Janeiro Rodríguez, y donde pensaba vivir al concluir su gobierno.
Pero además, Yunes Linares aseguró que esto no le da impunidad a quien devolvió el bien.
Esto mostró que Miguel Ángel Yunes ha comenzado la cacería de Javier Duarte, también.
¿Quién será el primero en capturarlo?.
¿Quién será el primero en poner en jaque a los cómplices de Javier Duarte?.
El Gobernador Miguel Ángel Yunes, ¿podrá proceder también contra Fidel Herrera?.
Por lo pronto ya tiene a un fiscal a modo, a Jorge Winckler, el cual –definitivamente- no protegerá a los miembros del fidelato y si trabajará para ingresar a los más que pueda al penal de Pacho Viejo.
La temporada mayor de caza de Duarte está abierta.

MAYULI, ¿DESCORTESÍA O DESORGANIZACIÓN? .Este 1 de diciembre paradójicamente, con la toma de protesta de Miguel Ángel Yunes Linares como gobernador de Veracruz, pudo haberse abierto la puerta a una nueva correlación de fuerzas en el Congreso de Veracruz, al impedirse el acceso a los invitados y representantes de la ahora oposición en Veracruz.
Los diputados de Morena ven posibilidades de aliarse al PRI y a la bancada mixta al interior del Congreso, incluso para el nombramiento de un nuevo Fiscal General del estado, sobre todo porque existe la posibilidad de que el encargado de despacho dure con esa posición hasta dos años.
De darse esto, serían 28 diputados contra 23 del bloque PAN-PRD.
El PRI, pues, al concretarse esto estaría rompiendo una efímera alianza con la bancada del PAN, la cual buscó primero aliarse con los resabios del fidelato que con los actuantes de Morena. “Ellos no quisieron acordar”, dijeron en el PAN, replicaron en Morena.
Esa hubiera sido una alianza lógica en un principio, para exterminar al enemigo común.
Ahora bien, la entrada al Congreso si estuvo marcada por una desorganización, tal vez bien organizada.
En el caso particular la confirmación de que estaba la acreditación para ingresar al Congreso del Estado, más no al salón de plenos, llegó sobre las 11 de la noche del día anterior, desde un número de teléfono de Veracruz; otros periodistas se quejaron de que nunca les llegó la acreditación para ingresar.
Y el manejo de las entradas lo hizo la oficina del gobernador entrante, no el Congreso.
La seguridad fue férrea, tanto que cuando llegó Miguel Ángel Yunes al Congreso del estado, las puertas fueron cerradas a cadena y candado. Y nadie entraba y nadie salía. De hecho el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, tuvo que ingresar por la puerta del estacionamiento porque por la de enfrente no lo dejaron pasar.
Un grupo de reporteros que salieron poco antes, cuando quisieron volver a ingresar no pudieron, no los dejaron, ni con todo y acreditación.
Tuvo que llegar el Secretario General del Congreso, Juan José Rivera Castellanos, con llave en mano, a abrirles.
Adentro Miguel Ángel Yunes ya como gobernador del estado anunciaba que se recuperaron 1,200 millones de pesos, lo que hizo sin ser todavía gobernador en funciones. Ahora, ya con la plenitud del poder anunció: No amnistía, no perdono.
Y los aplausos rebotaron por el Palacio Legislativo y se esparcieron por todo el espacio en el que se recibía la imagen de la toma de posesión.
Lo más llamativo de quienes abandonaron el Palacio Legislativo, fue la salida de los senadores del PRI, los Yunes rojos, Pepe y Héctor, quienes llegaron, accedieron a entrar solos, sin asistentes, y se encontraron con que no estaban en la lista de invitados y que por lo mismo no tenían lugar asignado.
¿Error de organización?.
No fue el único caso, tanto que los diputados de las bancadas de Morena, PRI y la conjuntada, se salieron del salón de sesiones y accedieron a regresar, pero bajo protesta, porque a sus invitados, a los miembros de sus partidos, tampoco les habían asignado lugar.
Amado Cruz Malpica, coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados local, consideró esto –mínimo- como una descortesía política.
Y refirió también que estaban con pláticas para conformar una nueva alianza con el PRI y con la bancada conjunta.
Así, las próximas conjunciones para votar pueden ser de la oposición contra los partidos en el poder.
Esto –obviamente- será una dificultad para que se logre el “pacto social por el bien de Veracruz”, al que convocó a los veracruzanos.
Esta vigilancia férrea tuvo también la característica de romper con el reglamento que los nuevos diputados hicieron para regular las comparecencias de los funcionarios de gobierno del estado, en el cual anotaron que la seguridad dentro del recinto legislativo correría a cargo del cuerpo de vigilancia del mismo… Pero este 1 de diciembre llegó la fuerza pública estatal y tomó el control de todo.
Por ahí, ya dejaron mal a los diputados, porque no les dejaron controlar el acceso a lo que ellos llaman “su casa”.
El nuevo gobernador buscó contener aglomeraciones, manifestaciones tumultuarias, y por lo mismo en el Palacio Legislativo tuvo la segunda salutación como gobernador, con los invitados que estuvieron ahí.
La primera fue en la madrugada de este 1 de diciembre, cuando entró al Palacio de Gobierno y ocupó la oficina del Gobernador, para de inmediato comenzar a operar en la forma en que debería realizarse la toma de protesta.
Sus primeros acuerdos como gobernador entrante fueron de contención de grupos que amenazaban con manifestarse en la Plaza Lerdo, en el Palacio Legislativo, frente a la SEV, o frente a Finanzas.
Quedaron los acuerdos vigentes, quedaron los reclamos pospuestos.
Y quedó vigente la ¿amenaza?, ¿advertencia?: las expresiones de protesta no llevarán a la anarquía… La aplicación de la ley se hará cuantas veces sean necesarias –porque- uno de los más graves problemas es el déficit del estado de derecho; cuando se dejó de acatar la ley, se expandió como humedad.
Miguel Ángel Yunes llegó al Palacio Legislativo con sus aliados los perredistas y ahí, para reforzar la nueva conjunción, en su discurso dijo “democracia ya, patria para todos”, el lema del PRD, del PRD de Cuauhtémoc Cárdenas, del que fue fundado el 5 de mayo de 1989.

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