Los días y las semanas después de las elecciones del pasado domingo 5 de junio han ido transcurriendo de manera inexorable.
Los actores políticos de esa justa electoral que este sábado 5 de noviembre cumple cinco meses de celebrada, se mueven con la misma intensidad pero con diferente objetivo.
El candidato ganador Miguel Ángel Yunes Linares, ha desplegado una actividad intensa con el ánimo de asumir la primera magistratura del estado en las mejores condiciones posibles, y para ello, ha dispuesto la designación de un equipo de colaboradores cercanos y leales a su proyecto para que inicien los trámites de la entrega recepción de cada una de las dependencias estatales, equipo que es encabezado por Manuel Muñoz Ganem, su administrador que desde siempre le ha acompañado en todas sus encomiendas públicas y que ahora es el más perfilado para ocupar la Secretaría de Finanzas, secretaría que contará con toda la confianza absoluta de quien será el mandatario estatal a partir del 1 de diciembre. Y ante los escándalos de corrupción que envuelve a la administración estatal que fenece el Gobernador Electo ha ordenado una detallada y minuciosa auditoría a todas las áreas de gobierno, auditorias que le permitirán descubrir el verdadero desfalco administrativo y financiero orquestado por el ahora gobernador con licencia, quien por esos graves delitos y omisiones se encuentra en calidad de prófugo de la justicia, cuyos principales secretarios de despacho y hombres de confianza enfrentan serias denuncias ante la Auditoría Superior de la Federación y ante el Sistema de Administración Tributaria.
Por otro lado, el senador priista Héctor Yunes Landa, después de un breve periodo de ausencia luego de los desastrosos resultados electorales para su partido que lo llevaron a convertirse en el primer candidato del PRI a la gubernatura del estado en ser derrotado por un candidato opositor, se ha levantado y ha regresado a su peregrinar a lo largo y ancho de la geografía veracruzana, reactivando reuniones con la militancia priista de las diferentes regiones del estado, retomando el proyecto de convertirse de nuevo en el candidato a gobernador del PRI por segunda ocasión para el 2018. Un proyecto que ahora enfrenta la oposición abierta y soterrada de parte del otro grupo priista que encabeza el senador José Francisco Yunes Zorrilla, quien alega en corto y en privado que la promesa de Héctor Yunes Landa fue que él sería candidato para la gubernatura de dos años y Pepe Yunes lo sería para la de seis años en el 2018.
Pero a raíz de los desastrosos resultados electorales que llevaron a la derrota a Héctor Yunes Landa, al parecer la promesa se ha roto porque sencillamente acusan los integrantes del grupo de Héctor Yunes Landa que la famosa estructura de Pepe Yunes nunca se vio por ningún lado, ni siquiera en los distritos donde se supone tiene su principal fuerza política como Perote y Coatepec, mucho menos en el resto del estado, lo peor del caso que aunque se ha querido mantener en silencio es que con el paso de los días se sigue comprobando que el famoso programa SAFIRO puesto en manos de los “pepeyunistas” Armando Reyes Moctezuma y Víctor Hugo Alarcón Limón fue un verdadero fraude, que hicieron creer que los casi un millón de “activados” pagados de a cincuenta pesos por persona, más otros quinientos pesos para las personas que presentaron esas listas fantasmas darían como resultado un abultado triunfo electoral.
En el distrito 10 de Xalapa para que alguien se dé una idea de la mentira, Armando Reyes Moctezuma y Víctor Hugo Alarcón Limón, presentaron en los formatos del programa SAFIRO un total de 80 MIL ACTIVADOS (de a 50 pesos) por el que se pagó la cantidad de CUATRO MILLONES DE PESOS, 80 mil personas de carne y hueso que saldrían de las 137 secciones y que votarían de manera masiva en las 302 casillas, quienes serían movilizados por 350 secretarios técnicos que les fue autorizado un pago de 2500 pesos por persona lo que arrojó otro pago en el distrito 10 de Xalapa por la cantidad de 850 mil pesos, lo mismo por el candidato a gobernador, Héctor Yunes Landa que por la candidata a la diputación local, Corintia Cruz Oregón.
Los resultados electorales obtenidos por cada uno de ellos hicieron que se descubriera el fraude de este operativo.
Corintia Cruz Oregón con mucho trabajo alcanzó 11 mil votos y Héctor Yunes Landa 13 mil votos. ¿Dónde quedaron los 70 mil votos prometidos por estos profesionales del fraude a sus mismos compañeros de partido?
Y aunque los datos los han guardado de manera celosa para que nadie escriba nada al respecto, a cuenta gotas van saliendo, poco a poco, filtrándose como la humedad, lentamente, hasta humedecer y manchar toda la pared.
Estos detalles de números donde mucho dinero, fue a parar a bolsillos de varios operadores políticos en el estado coordinados por Armando Reyes Moctezuma, es el principal motivo que en el 2018 enfrentaran a muerte a estos grupos de priistas.
Lo único bueno de la historia es que quien sea el elegido ya no podrá decirse engañado de sus mismos compañeros de partido.

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