Desde hace varios años los dirigentes formales del partido tricolor a nivel nacional y a nivel estatal que es el caso que nos ocupa, fueron testigos del debilitamiento de las poderosas centrales obreras como la CTM, la CROC y la CROM, sindicatos que dejaron de ser fuente inagotable de votos de sus agremiados a favor del PRI y de sus candidatos.
La falta de empleos que con el paso del tiempo se ha acentuado, los bajos y miserables salarios de la clase obrera pero sobre todo la rampante corrupción de sus líderes sindicales son algunas de las causas fundamentales por la que sus dirigentes nacionales, estatales, regionales y municipales perdieron la capacidad de convocatoria y de manipuleo a favor de los abanderados del partido tricolor en la búsqueda de los diferentes cargos de elección popular, desde las peleadas alcaldías, diputaciones locales, diputaciones federales, senadurías, gubernaturas y Presidencia de la República.
Aunque aún podemos ver en la actual administración federal a notables líderes obreros usufructuar cargos de elección popular como es el caso del senador Carlos Romero Deschamps, líder nacional de los trabajadores del Sindicato Petrolero, gremio que se ha visto severamente afectado por la llamada Reforma Energética que ha traído como consecuencia el despido masivo de obreros de este poderoso gremio, cuya fuerza electoral en las principales ciudades con instalaciones petroleras se ha disminuido notablemente; Joel Ayala Almeida, dirigente nacional de la Federación del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado, quien actualmente despacha como Senador plurinominal; Mónica Arriola Gordillo, senadora plurinominal del PANAL, impuesta como candidata por su señora madre Elba Esther Gordillo Morales, entonces dirigente nacional del SNTE, actualmente en prisión. Mónica Arriola falleció recientemente por un cáncer en el cerebro; Isaías González Cuevas, dirigente nacional de la CROC, quien despacha como senador por el estado de Baja California Sur, disminuido totalmente en su salud por su acentuada edad, debilidad física que provocó que dirigencias estatales como Veracruz encabezados por Tomas Tejeda Cruz, se le rebelaran y provocaron una disidencia que hasta la fecha permanece, fractura interna del croquismo en la entidad que debilitó aún más el corporativismo electoral de esta agrupación y Armando Neyra Chávez, senador plurinominal del PRI, sin más trayectoria que haber sido secretario general del sindicato de trabajadores de la industria embotelladora en la Ciudad de México, estos personajes mencionados, podrían ser, los últimos senadores provenientes de las filas obreras, cuyos gremios ya no son garantía de triunfo para nadie, incluyendo para ellos mismos en caso de ser beneficiados con alguna candidatura.

LAS MALAS CUENTAS DE LOS SINDICATOS OBREROS EN VERACRUZ

Héctor Yunes Landa, el candidato a gobernador del PRI, que fue derrotado en las urnas en las pasadas elecciones locales del mes de junio, cometió el error de su vida al confiarle su triunfo a importantes líderes sindicales a cambio de cargos de elección popular, creyendo que de esa manera, estos líderes llevarían miles de votos para su causa. La realidad en las urnas demostró que los líderes beneficiados con candidaturas a diputaciones por la vía plurinominal, porque casi nadie tiene residencia en su lugar de origen o donde viven, fueron otra de las causas de esta estruendosa derrota electoral.
Luisa Ángela Soto Maldonado, dirigente de los trabajadores de la Secretaría de Salud fue impuesta como candidata a la diputación local plurinominal en el número cuatro de la lista que registró el partido tricolor ante el OPLE, desechando el candidato a Gobernador Héctor Yunes Landa, todos los señalamientos de corrupción que esta señora ha instaurado en contra de su mismo gremio, y quien desde hace varios meses enfrenta denuncias por fraude. Luisa Ángela no sumó votos para que Héctor Yunes Landa pero con su mentira bien vendida de que controlaba a los trabajadores de su sindicato y a la familia de ellos, es ya diputada local.
Otro personaje que llegará al Congreso Local de Veracruz a partir del 5 de noviembre es Carlos Manuel Vasconcelos Guevara, exlíder petrolero en Coatzacoalcos, destituido y detenido en la época del “Quinazo”, quien se ha mantenido como dirigente regional de la CTM en la misma ciudad, pero cuya fuerza electoral se reduce a “nada”, tan es así que en Coatzacoalcos, los dos distritos electorales fueron ganados por los candidatos de MORENA, sin embargo, este señor, ahora está exigiendo la candidatura a la presidencia municipal de Coatzacoalcos, porque dice que siendo él, el candidato de su partido, tiene todas las posibilidades de ganar el cargo, alardeando contar con todo el apoyo para obtener la postulación del senador José Francisco Yunes Zorrilla. Desde ahora se puede adelantar con los ojos cerrados que si Carlos Manuel Vasconcelos Guevara es el candidato impuesto por el PRI estatal para la alcaldía de Coatzacoalcos su derrota desde su postulación sería una de las más seguras. Y obviamente como ocurre con todos los candidatos que pierden la elección en las urnas, le sobraran nombres para culparlos de su derrota, sin aceptar nunca su incapacidad y su notable falta de estructura y trabajo en las colonias y congregaciones donde se definen los triunfos electorales.