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Racismo y discriminación a la inversa
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2016-07-09 - 10:40
Hay la percepción generalizada de que el racismo o discriminación es del no indígena hacia el indígena, del blanco hacia el negro o las demás razas, del normal hacia el homosexual. Lo cierto es que la diferenciación injusta también se da a la inversa de los casos mencionados.
Si un ciudadano común y corriente se instala en los bajos de Palacio de Gobierno en Xalapa a vender cualquier tipo de mercancías, lo expulsan inmediatamente, sin miramientos. Pero si se trata de alguien con el tipo racial indígena y vestido con ropa tradicional de los pueblos autóctonos sí se lo permiten y hasta le dan facilidades en su actividad lucrativa. Perdónenme, pero bajo cualquier circunstancia eso es discriminación.
Dice nuestra Constitución federal en su artículo 1º párrafo 5: “Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas”.
Aunque inmediatamente en el artículo 2º principalmente, y en artículos posteriores nuestra Carta Magna contradice lo anterior y otorga una serie de prebendas y privilegios a los “pueblos indígenas”, incluida esa aberración jurídica que constituyen los “usos y costumbres”. Es decir, que un sector de mexicanos, por su raza, lengua y tradiciones tienen derechos que no tienen el resto de los mexicanos. Y se dan situaciones como el de la alcaldesa de Chenalhó, Chiapas, que fue destituida del cargo porque los usos y costumbres indígenas no permiten que una mujer mande sobre los hombres.
Entre los usos y costumbres de todos los pueblos indígenas, desde antes de la Conquista y hasta hoy, está el vender a las mujeres como si fuesen ganado. Por eso es totalmente justificada la actitud que tuvo doña Marina o “Malinche” y que tuvieron miles de mujeres autóctonas que prefirieron, no sólo a los hombres españoles, sino a la idiosincrasia europea, cristiana, que era mucho más benevolente con las féminas.
Y no sé cómo resuelvan en su fuero interno el dilema, personas como las actrices Ofelia Medina, Ana Colchero o escritoras como Elenita Poniatowska, que al mismo tiempo se autoproclaman feministas e indigenistas.
¿Y qué de la elección de alcaldes y demás funcionarios por aclamación, cuando los demás mexicanos nos tenemos que regir por estrictas leyes electorales?
Discriminación; simple y llanamente.
Todo esto viene a colación porque el Municipio de Xalapa que encabeza el Licenciado Américo Zúñiga Martínez detectó que probablemente las indígenas que venden ropa supuestamente artesanal y demás “artesanías” (la artesanía es hecha a mano o de la manera tradicional, así que tal vez ni eso sean las mercancías que ofrecen) en el centro histórico, principalmente en los bajos de Palacio de Gobierno, no son más que vendedoras de una grande, lucrativa y bien organizada empresa fantasma, es decir, sin registro ante Hacienda ni nada.
Ojalá el Ayuntamiento esclarezca la verdad del caso, y salga a la luz si esas mujeres están siendo explotadas, o si ellas mismas engañan a la gente aprovechándose de su origen étnico. De cualquier manera, reitero, es discriminación que a algunos mexicanos o mexicanas se les permita, por su raza, lengua y vestimentas, lo que no se les permite a los demás, tan mexicanos y mexicanas como ellos.
MONJITAS “ROBACHICOS”
Pues que el pasado 3 de julio una muchedumbre de las localidades Ixhuapan, Tecuanapa y Monte Grande municipio de Acayucan, persiguieron a un taxi, al que dieron alcance y lo hicieron detenerse porque supuestamente en él iban quienes minutos antes habían robado un niño. Del vehículo hicieron bajar a dos azoradas monjitas de las de cofias y hábitos completos hasta los tobillos, es decir, de indumentaria de cabeza y cuerpo que como las musulmanas sólo deja ver el rostro, que pedían desesperadamente ser tratadas con respeto.
Con la intervención de la policía local y de la Marina Armada la situación se aclaró y las alarmadas religiosas se identificaron como pertenecientes al convento Hermanas Clarisas Franciscanas. Pero cabe señalar que de no haber sido por esa intervención de marinos y policías, los enardecidos y desinhibidos pueblerinos habrían encuerado a las pobres monjas (esa era su intención según declararon ellos mismos), porque pensaban que los hábitos eran un disfraz para poder secuestrar menores sin despertar sospecha.
Al no haber pasado a mayores, fuera del susto que se llevaron las temporalmente calumniadas hermanas, el hecho no deja de tener algo de chusco. Sin embargo, situaciones como esa nada tienen que pudiesen causarnos risa, ya que la turba es ciega e irracional, y ya se han dado casos de linchamientos de inocentes. Simplemente en el caso mencionado en Acayucan: ¿qué hubiera pasado si no llegan los policías y la Marina? ¿Hasta dónde hubieran llegado los habitantes de esas comunidades con las religiosas al pensar que eran robachicos disfrazadas de monjas? Por lo menos lo de arrancarles los hábitos y desnudarlas sí lo hubieran hecho porque, reitero, ellos mismos declararon que esa era su intención para “desenmascararlas”.
LA CNTE LE DOBLÓ LAS MANITAS A PEÑA NIETO
¿Se dio cuenta, estimado lector, del cambio de tono en el discurso sobre la reforma educativa por parte del presidente, del secretario de Gobernación y de Aurelio Nuño Mayer? Sobre todo éste último, tan firme e intransigente que se escuchaba y se veía, ahora ya ni el término “reforma educativa” quiere mencionar.
A raíz de los lamentables acontecimientos en Nochixtlán, Oaxaca, el Licenciado Osorio Chong amenazó con aparente seguridad que iba a desalojar los bloqueos de los pseudomaestros. Señor Osorio: si no va a cumplir no amenace; resulta peor. Como una madre que se la pasa diciéndole al niño: “Te voy a nalguear, te voy a nalguear…”, y cuando el chamaco vuelve a hacer una travesura, la mamá no lo hace, no cumple. Pues el niño se va haciendo más travieso cada vez. Lo pronostiqué en una entrega anterior: en el Congreso ya hasta se habla de una contrarreforma educativa.
Y hasta el próximo sábado, si Dios lo permite.

raulgm42@hotmail.com

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