¿VIVE DE LA LIMOSNA?.. Dice Augusto Zamora Lara, consejero de la Coparmex, que el gobierno de Javier Duarte de Ochoa tiene un adeudo con empresarios veracruzanos que podría ascender a los mil 500 millones de pesos en pasivos. Sin embargo, el gobierno se niega a reconocerlo. Y es que Javier Duarte resultó ser –como dicen en los pueblos– un verdadero malapaga. Recursos sí hay, pero como todo Veracruz lo sabe, los han desviado para otros fines.


LA GUBERNATURA, UN
JUEGO DE AJEDREZ

“REY Y PEÓN VUELVEN A LA MISMA CAJA”... Héctor Yunes Landa, José Yunes Zorrilla, Tomás Ruiz, Juan Bueno Torio y Renato Tronco, son algunos de los nombres que suenan para la gubernatura, y se acaba de agregar Gerardo Buganza. Este último alborotó aún más el gallinero electoral, pues se lanzó como independiente. Se maneja ya en los corrillos políticos, en cafés y en la calle que Buganza es el “gallo” del gobierno estatal, pues es de los pocos, si no el único, que podría dar batalla a los de oposición, más allá del lugar que pudieran alcanzar Héctor Yunes, quien restauró su relación con el gobernador en turno, o Yunes Zorrilla, quien mantiene su línea pintada con el mandatario, pero le lanza dardos mortíferos que lo hacen tambalear ante la opinión pública, puyando los blancos débiles, como la deuda pública, sin contar que ha amenazado con que, de llegar a la gubernatura, meterá a la cárcel a los corruptos. Sin embargo, cuando pasen las elecciones los perdedores protestarán e impugnarán, mientras que los que ganen llamarán a los demás a sumarse, pero al final, como el juego del ajedrez, rey y el peón volverán a la misma caja…, y todos, PRI, PAN, PRD, PVEM, MC, se sentarán en la misma mesa como buenos amigos y ahí no habrá pasado nada. Duarte echa las cartas pensando que del altiplano lo dejarán hacer y deshacer, y si así fuera, pues tiene para la independiente a Buganza, mientras que para el PRI y el Verde, su corazón late por el “Cisne”, Tomás Ruiz y en última instancia a Erick Lagos. Por supuesto que para Duarte los Yunes rojos ni existen.

DETIENEN AL EX
ALCALDE DE FORTÍN

¿Y EL DINERO, APÁ?.. Cuando se lee que la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol, por sus siglas en inglés) detuvo al ex alcalde de Fortín, César Torrecilla Ramos, más de uno podría pensar: ¡ah chingaos!, ése ha de ser igual o más peligroso que Joaquín Guzmán “El Chapo”, pero no, el hombre sólo no comprobó 40 millones de pesos cuando administró al municipio de Fortín, al igual que otros ex funcionarios, charalillos, que tienen giradas órdenes de aprehensión. Esta detención tendría más valor si al mismo tiempo se hubiera anunciado la devolución del millonario desfalco, pues Fortín se muere lentamente, no hay empleos, los empresarios no quieren invertir a pesar de ser un corredor industrial importante junto con Córdoba y Orizaba y la delincuencia sigue azotando a las comunidades sin que nadie la pueda frenar. El saqueo que han hecho los ex alcaldes de las arcas ha debilitado al municipio y con esos 40 millones de pesos, sin duda que se harían maravillas en beneficio del pueblo. Aquí sólo resta preguntar, como el comercial, ¿y el dinero, apá?

REGULAN HORARIO DE
VENTA DE ALCOHOL

PERO DE VERAS... Ayer, el Congreso local aprobó la prohibición de venta de alcohol después de las dos de la mañana en todo el estado y sanciones para quienes incumplan la nueva legislación. Hasta aquí todo está muy bien, es más, se aplaude la medida, pues con ello se evitaría que los jovencitos sean presa de adicciones como el alcohol a temprana edad. Ahora habrá que ver que la santa corrupción que impera en el estado no quebrante las disposiciones aprobadas, pues más de uno buscará dar su “mordida” para vender en horario no permitido. De acuerdo con el dictamen aprobado, se revocará la licencia o clausurará definitivamente el expendio que infrinja las disposiciones. Tampoco podrá venderse alcohol en una proximidad menor a 300 metros de escuelas, centros deportivos, cuarteles, parques, templos, hospitales y clínicas. A quien procure, provea, induzca u obligue a un menor de 18 años a consumir bebidas embriagantes o nocivas para la salud, se le impondrán de seis a 12 años de prisión y multa de hasta 600 días de salario mínimo. ¡A ver qué pasa, pasado un tiempo!