Lo que las feromonas unen…que las siglas no separen
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Así como Raúl Salinas de Gortari fue el patrocinador del Partido del Trabajo, allá por los años noventa del pasado siglo, mucho se dice en el sentido de que el Partido Encuentro Social, habría sido aupado por el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, claro, no hay un memorándum firmado, pero radio bemba suele ser certera.

Pues bien, a pesar de que el hidalguense posteó en su cuenta de Twitter, después de reunirse con José Antonio Meade: “la unidad es y seguirá siendo la fortaleza del PRI Nacional”, las evidencias indican que el mentado mini partido, le jugará las contras al de ‘conducta intachable’, al ir en coalición con Andrés Manuel López Obrador.

Sin embargo, al margen del doble juego del derrotado precandidato, lo que llama la atención, es la decisión del tabasqueño de aliarse con un grupo político identificado con la extrema derecha.

Ante las críticas de sus propios militantes, el señor López salió a justificarse diciendo que no hay contradicción, porque él es guadalupano y juarista, lo que equivale a ser ateo por la gracia de Dios.

Ya veremos si el ‘liberal mesías’ no se tiene que tragar sus palabras, cuando al final del día, nos enteremos que los del PES son un troyano y acaban boicoteando al morenazo.

No todo PES es PEJE.


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